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Amelia Camacho es licenciada en gastronomía, fundó una tienda en línea de repostería y pastelería llamada Happy Cake. A ella le encanta la decoración, pastelería y repostería desde los ocho años.
Amelia nos comparte cómo una pandemia la impulsó a iniciar su propio negocio.
Hola Amelia, gracias por esta entrevista. Cuéntanos sobre ti y lo que haces.
Mi nombre es Amelia Camacho, vivo en Hermosillo, Sonora, al norte de México y me dedico a la repostería/pastelería.
¿Qué estudiaste? ¿Por qué decidiste esa carrera?
Soy licenciada en gastronomía. Desde los ocho años me gustaba decorar los platillos, ¡en serio! Me gustaban los programas relacionados a comida, cómo preparar, decorar y de las personas que viajaban por el mundo buscando platillos en cada ciudad y en cómo se mezcla la cultura con la alimentación.
La mayoría de las personas al escuchar la palabra “gastronomía” piensa “chef”, no es así… Chef, es ser una persona con demasiada experiencia en el ámbito y gastronomía es una carrera en donde no solo es dominar técnicas de cocina, es contabilidad, marketing, diseño de interiores, etc.
¿Cuál fue la inspiración detrás de Happy Cake? ¿Por qué decidiste crear tu propio negocio de pasteles?
Desde pequeña siempre me atrajo la decoración, pero la repostería y pastelería fue un mundo mágico para mí, porque me atrapó lo dulce y bello que puede ser un pastel. En mi pastelería abunda el amor.
Happy Cake en general es súper linda y tiene un gran estilo. ¿Qué experiencia nos podemos llevar de Happy Cake?
Realmente quiero que te lleves la experiencia de lo rico de mi pastel, que no sea solo la decoración lo que impacte, quiero que veas que lo que elaboré fue totalmente creado para ti, que te cause una sonrisa.
¿Podrías platicarnos cómo fue tu experiencia viviendo en España? ¿Por qué fuiste, qué fue lo que aprendiste, en que te cambió vivir esa experiencia?
En la universidad debes realizar prácticas, puede ser dentro o fuera de tu país, hay una compañía que se dedica precisamente a facilitar a estudiantes a realizar sus prácticas fuera de su país. Mi gran sueño / meta era finalizar mis prácticas en España. Me tocó realizarlas en una isla canaria, Tenerife. Realicé mis prácticas en un hotel del sur, ahí mismo me ofrecieron hospedaje.
Mis prácticas fueron servicio al cliente; agradezco mucho haberlo escogidO, así aprendí mucho. Tenerife es un sitio totalmente vacacional, es un lugar hermoso, lo llaman “eterna primavera”, el clima es perfecto, hay demasiado turismo. Conocí muchas personas de Venezuela, Argentina y muy pocos españoles, curioso ¿no? Jaja.
Aprendí demasiado de las personas con las que conviví, todos estaban motivados, todos los días son una oportunidad para crecer.
Me llene de gratitud, no dejaba de sonreír y sentirme agradecida con mis padres; me di cuenta —una vez más— que sin ellos esto no habría sido posible y al estar lejos de ellos. Me di cuenta de que el dicho “ándate sola, que pronto encontrarás a personas que vibren de la misma manera que tú lo haces” es tan cierto. Conocí muchas personas que cómo desearía tenerlas aquí.
Me di cuenta de que el dicho 'ándate sola, que pronto encontrarás a personas que vibren de la misma manera que tú lo haces' es tan cierto.
Me tocó vivir esta experiencia en medio de una pandemia, fue por eso que tuve que regresar a México. Me tocaron dos días de encierro y el regreso fue complicado, fue algo de mucha adrenalina, coraje, tristeza e impotencia sobre este virus, muchos planes que tenía en mi cabeza, las posibilidades de quedarme más tiempo en Tenerife quedaron fuera de mi alcance. Tuve que regresar a casa por la pandemia, fue frustrante para mí.
Fue como “después de tanto, ya estoy aquí en España”… pero una vez que hicimos escala en Barcelona fue impactante ver el aeropuerto casi vacío, ver cómo las personas estaban totalmente cubiertas; vi una carriola cubierta con un impermeable, ver a un ser tan pequeño, protegido del ambiente, solo pude pensar en llegar a casa y estar con mi familia. Lamentablemente, debido a esto quedaron muchos cabos sueltos. ¡Pero esta pandemia me hizo iniciar mi propio negocio!
Llegué a México sin ningún trabajo, el mundo estaba paralizado. Pero la repostería y pastelería siempre han sido mi debilidad y hace ya más de cinco años yo tenía en mi cabeza una idea sobre unas galletas en forma de stencil, demasiado personalizadas. El plan era que tú me enviaras una fotografía, yo la iba convertir en plantilla de stencil y esa plantilla sería plasmada en el glaseado de la galleta; era algo que nunca había visto en mi ciudad.
El dinero que gané en Tenerife se estaba acabando, entonces —como sabía que no podía conseguir un empleo en medio de una pandemia— fundé Happy Cake. ¡Y fue perfecto! Porque se acercaba el día del padre y lo ideal fue hacerlo en honor a ese día, entonces empecé a buscar muchas maneras de adaptar mi idea de stencil.
Busqué aplicaciones, no me gustaban cómo quedaban, busqué a diseñadores y el costo estaba fuera de mi alcance y claro estaba que todos estábamos pasando por una situación de economía donde nos veíamos afectados la mayoría de las personas. Conocí outline y me encantó, era totalmente lo que quería plasmar.
Amo mucho el detalle, la intimidad, el amor entre las personas y mi pastel totalmente reflejaba eso y estoy contenta. Todo esto fluyó en tres días, utilice dos fotografías de prueba, una fue de una amiga con su papá y la otra fue de mi papá.
Invertí el poco dinero que me quedaba, tomé algunas fotografías de los pasteles y así comenzó la esencia de Happy Cake en ese instante, sin darme cuenta.
¿Qué ha sido lo más difícil y satisfactorio de iniciar tu negocio?
Difícil sería poder dar un precio y aspirar confianza. Soy nueva, mucha gente no me conoce puede resultar difícil que acudan a mí.
Lo satisfactorio es que amo poder transmitir algo positivo a través de mi trabajo, como también es cuando personas nuevas se acercan a mí y me dicen que me buscan por mi creatividad y los comentarios de mis clientes: “¡No me esperaba tanto!, ¡está hermoso!”; que se acerquen para ver los detalles del pastel, wow… es la mejor parte.
¿Qué es lo que más disfrutas de tu trabajo?
Poder ser yo, sentir que estoy haciendo lo que amo y hacer esto a mi ritmo.
¿Qué le recomendarías a alguien que esté considerando iniciar su propio negocio?
Si te emociona y apasiona con tan solo pensarlo, ¡hazlo! Sal de tu zona de confort, buscar maneras de invertir, no te deprimas si algo te salió mal, nadie comenzó haciendo las cosas bien, créeme. No te quedes con el error, quédate con la enseñanza. La vida es un aprendizaje, habrá días malos, pero recuerda el motivo por el cual comenzaste.
Recuerda siempre cuando estabas ingeniándotelas para iniciar y siéntete orgulloso, habrá mucha gente que no va a valorar tu esfuerzo pero eso es problema de ellos. No te agobies, en el camino habrá personas que valoren tu tiempo y esfuerzo.
¿Tus ingredientes favoritos y tus utensilios más usados?
Chocolate, siempre me ha encantado la combinación de algo demasiado dulce con un toque neutro. Mi pastel favorito de Happy Cake es Pan de chocolate con betún de casa. ¡Es perfecto!
Utensilios: cutter, batidor globo y manga pastelera .
¿Libro favorito?
La teoría de Sigmund Freud sobre “Iceberg”. Todos nuestros comportamientos son patrones eso me gusta de nuestra mente, el poder que tiene. Me gusta mucho leer sobre teorías de personas importantes en temas de psicología y psicoanálisis.
¿Planes personales y profesionales de Amelia?
Poder regresarles a mis padres lo mucho que han hecho por mí. No olvidar lo valioso que es mi cuerpo y cuidarlo siempre. Dominar más el inglés y el francés; el francés siempre ha sido demasiado complicado en cuanto a la pronunciación.
Me gustaría estar fuera de mi país por un tiempo, ya que me hizo aspirar a mucho más. Me di cuenta del poder del idioma, me quede con demasiadas ganas de poder tener más conversaciones con las personas en Tenerife.
Hacer más por el feminismo, es un tema que muchas veces me ha hecho llorar. Es impactante que aún haya personas que pasen por desapercibido todo lo que sucede con las mujeres, y ya es intolerante aceptar cualquier comentario ofensivo sobre este movimiento. No se dan cuenta que somos personas, nadie merece ser tratada como hoy en día muchas mujeres son tratadas, violadas y asesinadas. No es correcto, no está bien.
Trabajar con gente que admiro en este ámbito es una de mis metas sin duda. Tengo muchos lugares donde me gustaría trabajar. Obtener una maestría, seguir estudiando —tal vez alimentación o finanzas— aún no termino de decidirme pero sé que un día lo haré. Deseo lograr ser admirada por mi trabajo. Y así poder compartir algún día mi experiencia y conocimientos a más personas.
¿Qué haces cuando tienes un bloqueo creativo?
Darme un break, salir a pasear un rato, jugar con mis mascotas, tomar un café.
¿Qué consejo le darías a tú yo adolescente?
Cuídate, no hay nada más importante que tu salud mental y física. Ahorra, aprende nuevos idiomas, invierte en tu persona. Eres hermosa.
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Última edición: 28.11.2020
