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Michelle Leman
El silencio implica una forma de resistencia, una manera de mantener a salvo una dimensión interior frente a las agresiones externas. Aparece como un fenómeno dotado de propiedades calmantes, sanadoras, incluso como algo, simplemente fascinante.
El silencio nos permite ser conscientes de la conexión que mantenemos con ese espacio interior, la visibiliza, mientras que el ruido la oculta. Conectar con nuestro interior es el caminar, que transcurre en el mismo silencio. El terreno para cultivar las palabras es el silencio. Si las palabras no se desprenden de la impregnación de silencio, han salido del corazón y llegarán al corazón. El mundo necesita escuchar el silencio para poder entenderse y entendernos. La paz de un universo vacío es lo que esconden nuestras bocas en silencio. Hay silencios que oxigenan, equilibran y armonizan.
El silencio es la expresión más veraz y efectiva de las cosas innombrables. Y la toma de conciencia de que hay determinadas experiencias para las que el lenguaje no sirve, o no alcanza, es un rasgo decisivo del conocimiento. Así como cada voz tiene su timbre y una altura, cada silencio tiene un registro y una profundidad.
Podemos utilizar el silencio para conocernos mejor a nosotros mismos, para aislarnos del ruido. Y este es un valor para reinvidicar en el presente. Podemos abrir huecos en una rutina diaria para el silencio, para meditar, reflexionar y encontrarnos a nosotros mismos, y con la disciplina adecuada esos huecos serán cada vez mayores.
Buena parte de nuestra relación con el ruido, procede del desarrollo tecnológico, especialmente en su carácter más portátil: siempre llevamos encima dispositivos que nos recuerdan que estamos conectados, que nos avisan cuando hemos recibido un mensaje, que organizan nuestros horarios a base de ruidos. El tráfico y la contaminación acústica, en este contexto, los conciertos con el volumen muy alto, los auriculares en la oficina, la televisión y todo lo que nos rodea es ridículamente difícil tener un momento de silencio total, el silencio implica una forma de resistencia. El silencio se mezcla con la palabra:
Espuma que rebosa los lindes del asombro y va dejando un brillo de verdades en el aire.
—Pedro Moreno
La muerte en silencio, cuando la vida ha sido en silencio, gran enigma, mientras se es naúfrago de la noche en que tú habitas su cuerpo.
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Última edición: 15.04.2022
