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Todas podemos ser princesas

Porque el color de nuestra piel, no debería ser causa de inseguridad ni baja autoestima.

Por Andy Reyes

belleza-piel-morena.jpg Foto por The blank letter

Nunca pude ser una princesa. Soy mexicana, me gustaría definir mi tono de piel como una taza de café con leche, aunque últimamente mi piel se ha visto un poco roja. Hoy en día no me importa el color de mi piel, en mi niñez me fue muy difícil definir esto con algunos miembros de mi familia.

Mi hermano y yo somos morenos a comparación de mis primos, mi prima de tez blanca y mejillas rosadas es “la más bonita” o al menos eso es lo que dice mi tío, así que ella puede ser una princesa y yo no. Él dice que yo no puedo ser una princesa porque soy negra y las princesas negras no son bonitas.

Él no lo sabe, pero llevaré estas palabras conmigo durante más de 20 años.

Nunca pude ser una princesa cuando era pequeña y si lo intentaba, cerraba la puerta de alguna habitación de la casa y mi imaginación volaba, imaginando que la Princesa Aurora era morena y tenía el cabello castaño.

De mayor nunca sentí que encajaría en la familia de mi madre, yo siempre sería diferente. Leí en Facebook que una mujer de tez blanca tiene más posibilidades de ser contratada en un puesto ejecutivo que una mujer de color.

Trabajé como maestra en un jardín de infantes poco menos de un año. El autoestima de aquellas niñas era definitivamente malo.

Una hermosa niña llamó mi atención, era de piel oscura y hermosos rizos. Pero por alguna razón, las otras niñas no la aceptaban, la rechazaban por su color de piel, diciendo que era fea porque era morena.

Sentí mucha empatía con ella, yo había estado en esa posición muchas veces, sintiéndome avergonzada por el color de mi piel, sintiendo que no encajaba con mis amigos, tal como ella se sentía en ese momento; me acerqué a ella diciéndole que era hermosa tal como era.

Nuestra identidad es algo que nos definirá toda nuestra vida y nuestra única opción es ser fieles a nosotros mismos.

La parte más confusa de todo esto es que sientes que algo malo pasa contigo, te preguntas constantemente quién eres, pero a medida que envejeces, sabes que la belleza abarca más de un blanco o un negro, y eres más consciente de ti mismo.

Nuestra identidad es algo que nos definirá toda nuestra vida y nuestra única opción es ser fieles a nosotros mismos.

Para Moni.

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Última edición: 26.04.2020