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The blank letter
Esta historia empieza desde la primera relación formal que tuve, saliendo de la prepa ya tenía un novio que había pedido permiso a mi papá para estar juntos y toda la cosa. Obviamente siguiendo los patrones requeridos de la sociedad y cultura mexicana.
Entré estudiar la carrera y él no iba en la misma universidad que yo, así es que tuve muchas oportunidades de crecimiento escolar. Participé en todas las asociaciones que podía, tomando clases de la natación, despertándome super temprano y estudiando hasta altas horas de la noche. Tuve la oportunidad de irme de intercambio y recuerdo que cuando puse el tema en la mesa la respuesta de mi novio fue: “si te vas de intercambio, quiero que cortemos”. Siempre tuve claros mis objetivos así es que mi respuesta fue: “ok, si no quieres seguir, está perfecto. Pero yo me voy a ir de intercambio sí o sí”. Lo mismo me sucedió cuando decidí irme un verano a estudiar a Monterrey.
Primer consejo de las relaciones conscientes…
Hay que tener el espacio individual para poder encontrar nuestra verdadera naturaleza, lo que nos gusta, lo que nos mueve y cuál es nuestro propósito de vida.
Empecé a trabajar y encontré mi propósito. Me encanta estar en contacto con gente, conocer sus historias y ayudar a encontrar esos talentos y propósitos de las personas. Trabajar en Recursos Humanos en el área de capacitación, fue un gran descubrimiento. Encontré en dónde, mi potencial y mi talento, estaban realmente al servicio de las personas en el mundo corporativo.
Siempre trabajé en empresas francesas y tenía tanta determinación por aprender francés e irme a vivir a Francia, que sabía lo que tenía que hacer para lograrlo. Tener logros profesionales y dedicarme a trabajar en un horario de 9am a 6pm y en las noches de 7pm a 9pm ir a estudiar francés, de lunes a jueves.
Segundo consejo de las relaciones conscientes…
Enfocarse en seguir desarrollándonos como individuos y/o profesionistas. Esto significa que el tiempo que dedicamos a aprender y a seguir trabajando en nuestra carrera profesional hará que siempre tengamos algo que aportar a nuestra relación de pareja.
Viendo en retrospectiva también fue importante siempre tener prioridades bien definidas y mucho amor propio. Pero ese amor propio, como todos los amores de la vida, se tiene que alimentar día a día.
Mi relación empezó a NO ser consciente y mi potencial profesional se vio minimizado. No tenía tanta confianza, pero era muy buena en lo que hacía. Ya trabajando en Francia necesitaba tener un trabajo estable para poder continuar con mi visa. En ese momento mi novio de 10 años terminó conmigo y no quedaba mucho amor propio.
Empecé a construir mi amor propio y enfocarme en lo que realmente era buena, seguir mi propósito, pasión y eso fue enfocarme en mi carrera profesional a nivel internacional.
Siendo migrante en Francia siempre he tenido una pequeña inseguridad con respecto a mi nivel de francés, y es normal soy un ser humano con miedos e inseguridades.
Cuando cumplí 30 años ya era responsable de un equipo de trabajo a nivel internacional y recuerdo compartir este logro profesional con mi novio francés y su respuesta fue “No entiendo como puedes ser manager si tu nivel de francés solo alcanza para lavar los platos”. En ese momento no le di importancia a su comentario, pero fue el inicio que me hizo darme cuenta de que tener relaciones conscientes impacta mucho en cómo podemos alcanzar nuestro potencial profesional. También me di cuenta de mi malinchismo, un novio con ojos azules no significa tener una relación consciente.
Tercer consejo de las relaciones conscientes…
En las relaciones conscientes conocemos las vulnerabilidades de nuestra pareja, sin embargo, no utilizamos estas vulnerabilidades para dar golpes bajos. No existen los juicios y es en donde encontramos una oreja que nos escuchará con empatía y sin juzgar.
Al pasar los años y tener más experiencia tanto profesional como en la vida, tomé la decisión consciente de estar soltera durante algunos años y esperar a la relación consciente de mis sueños. Finalmente, esta pareja llegó. He seguido creciendo profesionalmente ya que tengo el espacio para seguir desarrollándome, aprendiendo y explotar todo ese potencial enfocado a mi propósito.
Una historia que me abrió los ojos en mi relación de pareja actual fue cuando tomé la decisión de comprar mi primera inversión en el mundo inmobiliario. Mi pareja, con más experiencia en el tema, sabía que tenía que tener varias negociaciones con banqueros y agentes inmobiliarios. Me ayudó a prepararme y me dijo, te toca ir tú sola y negociar en francés con ellos, yo estoy aquí apoyándote, pero eres tú quien hará todo eso. Confío en tu francés, en tu visión, en tu proyecto.
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Cuarto consejo de las relaciones conscientes…
Estar con una persona que pueda ver tu luz, tu potencial, conocer tu propósito sabiendo que esa persona te apoyará siempre. El crecimiento profesional y el propósito siempre van primero, antes que la misma relación.
Con esta reflexión, es importante tener en cuenta que las personas que pertenecen a nuestro círculo cercano, sobre todo nuestras parejas, impactarán positiva o negativamente en llegar a un punto máximo de nuestro potencial profesional. Es nuestra decisión trabajar en nuestras vulnerabilidades para rodearnos de gente que nos cuidará y hará que nuestra luz brille mucho más.
Deseo que esta reflexión les llegue a muchas mujeres y recuerden que ¡solamente tenemos una vida!
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Última edición: 19.02.2023
